sábado, 3 de octubre de 2015

Tu eras el huracan, y yo la alta

RIMA XLI

Tú eras el huracán, y yo la alta
torre que desafía su poder.
¡Tenías que estrellarte o que abatirme...!
        ¡No pudo ser!

Tú eras el océano; y yo la enhiesta
roca que firme aguarda su vaivén.
¡Tenías que romperte o que arrancarme...!
        ¡No pudo ser!

Hermosa tú, yo altivo; acostumbrados
uno a arrollar, el otro a no ceder;
la senda estrecha, inevitable el choque...
        ¡No pudo ser!

Gustavo Adolfo Bécquer

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sus comentarios y sugerencias nos ayudan a mejorar!